Revocar la patente lograría precios más accesibles para los 170 millones de niños sin la vacuna a nivel global
Médicos sin Fronteras ya lo ha logrado en Europa y China
CdP.- Médicos sin Fronteras volverá a verse las caras con los abogados de Pfizer. La organización ha presentado una solicitud legal para revocar la patente de la vacuna contra la neumonía (PCV13) que en 2017 le concedieron a la farmacéutica en Corea del Sur y la India.
Pfizer es una de las dos farmacéuticas que dominan los derechos de producción de la vacuna a nivel global, la misma empresa que en 1996 realizó ensayos ilegales con niños nigerianos durante una epidemia de meningitis. La otra es GlaxoSmithKline.
El dominio de la patente eleva el precio de la vacuna hasta 120 y 160 dólares por dosis en los países desarrollados, cuando su costo de producción es inferior a un dólar.
Los precios elevados son la causa de que miles de niños mueran en 65 países del mundo, donde los gobiernos no pueden introducirla en sus paquetes básicos de vacunación porque no la pueden comprar, revela Médicos sin Fronteras.
Sudáfrica, por ejemplo, gasta más de un tercio de su presupuesto en inmunización solo en la compra de la vacuna de Pfizer; en India, la vacuna solo ha podido aplicarse en tres estados por su elevado costo: Himachal Pradesh, Bihar y Uttar Pradesh.
Revocar la patente permitiría que otros fabricantes desarrollen y comercialice la vacuna a precios accesibles. Médicos Sin Fronteras ha exigido a Pfizer y GlaxoSmithKline a través de diversas campañas que reduzca el precio de la vacuna a cinco dólares por las tres dosis que se necesitan para inmunizar a un menor, por lo menos en los países en desarrollo y para las organizaciones humanitarias.
Beneficios multimillonarios
Su lucha es contra intereses millonarios. Pfizer incrementó en 12.270 millones de dólares anuales sus ganancias en el cuarto trimestre de 2017 o 2,2 dólares por acción, frente a los 775 millones o 13 centavos por acción en el mismo periodo del año anterior, de acuerdo con Reuters.
La demanda de vacunas contra la neumonía a nivel global y de medicamentos contra el cáncer de mama dispararon las ganancias de la farmacéutica más allá de lo esperado por los analistas, explica la agencia.
La compañía produce 22 millones de jeringas prellenadas tan solo en su planta ubicada en la ciudad de Garín, Buenos Aires. Muchas más que el millón de niños que mueren anualmente por neumonía, una enfermedad que, siendo totalmente prevenible en menores de cinco años, es la que más los mata. Cuatro de cada cinco víctimas en 2015 tenían menos de dos años y 99% vivía en países en desarrollo.
Medicamentos más accesibles
No obstante los millones que se interponen en la lucha por hacer valer el derecho universal a la salud, Médicos sin Fronteras ha registrado presumibles logros.
La patente equivalente a la vacuna de Pfizer fue revocada por la Oficina de Patentes de Europa y por la Oficina Estatal de Propiedad Intelectual de China porque no cumplía con los requisitos de actividad inventiva.
Pfizer redujo a 8,65 dólares por niño el precio de la vacuna para las organizaciones humanitarias que trabajan en contextos de emergencia.
Aunque lentos, se trata de dos pasos firmes por lograr medicamentos más accesibles para las personas empobrecidas y una menor mortandad infantil. Una lucha que no para pues, de acuerdo con Save The Children, aún existen 170 millones de niños sin vacunar.