Más de 18.800 personas murieron en 2017 por causa del terrorismo
Irak, Siria y Europa occidental mejoraron sustancialmente gracias al debilitamiento de ISIL
El 84% de las muertes por terrorismo se concentraron en 10 países
CdP.- Las muertes asociadas al terrorismo disminuyeron un 27% en 2017, una mejora por tercer año consecutivo luego de que en 2014 se alcanzó el punto máximo de defunciones en dos décadas con más de 33.000 muertos.
No obstante la significativa reducción, la cifra de 2017 continúa siendo escalofriante. Más de 18.800 personas murieron por esta causa, de acuerdo con el Índice Global de Terrorismo 2018 elaborado por el Instituto de Economía y Paz.
En 2017, casi el 60% de los países evaluados, 94 de 163, mermaron sus decesos por terrorismo, el mayor número en 14 años, por lo que su impacto económico descendió también en un 42% anual para un total de 52 mil millones de dólares.
Irak y Siria, dos de los países con largos historiales de conflictos bélicos a nivel global, tuvieron la mayor caída anual de muertes por terrorismo, con 5.000 y 1.000, respectivamente. No obstante, continúan en los primeros cinco puestos del ranking.
Su avance positivo obedece al debilitamiento de la capacidad de organización del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL por sus siglas en inglés), que ha perdido la mayor parte de su territorio y casi todos sus ingresos, lo que se tradujo en una reducción de 52% anual de la cantidad de muertes atribuidas a sus ataques, así como de su letalidad.
Un beneficio que se extendió a Europa occidental, que registró una baja del 52% en las muertes también por la pérdida de fuerza de ISIL, así como por el aumento de recursos para la lucha contra el terrorismo; en 2017, la región registró 81 muertes frente a las 168 del año anterior.
Los datos preliminares sugieren que el decaimiento de ISIL continuará en 2018, pero todavía no se puede cantar victoria,. El informe advierte que continúan surgiendo nuevas amenazas porque las organizaciones terroristas islamistas se han dividido y formado nuevos grupos y alianzas a un ritmo acelerado. De los 169 grupos terroristas responsables de al menos una muerte en 2017, 42 eran nuevos o no habían provocado ninguna en los tres años anteriores.
Menos terrorismo pero más intenso
Si bien las muertes por terrorismo han disminuido considerablemente desde su punto más alto en 2014, los datos revelan que el fenómeno continua sumamente concentrado y que se ha intensificado.
El 84% de las muertes por terrorismo se concentró en 10 de los 163 países evaluados en 2017. La presencia de conflictos violentos y de guerras importantes fueron el denominador común de esta decena. Tan solo en cinco países, Afganistán, Irak, Nigeria, Somalia y Siria, se registraron más de 1.000 muertes; y en otros 19, más de 100.
En Somalia, por ejemplo, se registraron 1.470 decesos asociados al terrorismo, pero un solo ataque produjo el 40% de estos, 587 personas. Lo mismo sucedió en Egipto donde un solo incidente provocó 311 muertes o el 47% del total acaecidos en 2017, esto es, 655 personas.
Ambos países registraron los mayores incrementos anuales de decesos: Somalia con un 93% y Egipto con un 123%, posicionándose en el sexto y noveno lugar del ranking, consecutivamente.
También por un solo incidente Angola subió 74 posiciones en el ranking de 2017 para ubicarse en el lugar 43 frente al 117 que ocupaba en 2016. Un ataque con gas a una convención de testigos de Jehová que dejó 405 heridos fue la causa, aunque no resultó en muertos.
La extrema derecha, también en el punto de mira
El terrorismo provocado por la extrema derecha es otro frente que se ha intensificado. Entre 2013 y 2017 mostró una tendencia al alza en América del Norte y Europa Occidental con 66 muertes y 127 ataques, la mayoría llevados a cabo por actores aislados, nacionalistas blancos o anti-musulmanes.
No obstante la disminución de las muertes en los últimos tres años, el terrorismo continúa siendo un fenómeno mundial. En 2017, el 41% de los países evaluados, o bien 67, registraron al menos una muerte y el 60% o 98, al menos un ataque, asegura el informe.
El terrorismo presenta particularidades de acuerdo con la región donde ocurre. En Europa y América del Norte los ataques dirigidos a infraestructuras han sido más comunes que en cualquier otra región, con un 23 % y un 48% del total entre 2002 y 2017, respectivamente.
Mientras que los bombardeos y las explosiones han sido las tácticas más comunes en el Medio Oriente, con el 68% de los ataques. En América Central y el Caribe los asesinatos como porcentaje del total han sido más altos que en cualquier otra región en el mismo periodo de tiempo.
A nivel global, los ataques con bombas y las agresiones armadas han sido las formas más comunes de ataque; pero los incidentes relacionados con la toma de rehenes, el asesinato y los ataques a instalaciones han aumentado más de diez veces en 15 años.